¡No hay nada en Tlaxcala! ¡Nada! El centro lo recorres en diez minutos, los museos son muy caros y las iglesias no tienen mayor interés. Eso sí, tocan canciones larguísimas, de más de un cuarto de hora y con sólo dos acordes.
Me lo pasé la mar de bien :)
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
4 comentarios:
Por eso no confio en el turismo nacional.
Pudo haber sido peor, Grimalkin querida: Pudiste haber ido a San Juan del Río :P
Qué bueno que estuviste tan a gusto. Besto enorme.
No se trata de confiar en el turismo nacional, Darky, sino en quien te acompaña.
Con San Juan del Río no te metas, que ahí tengo familia y un muy buen amigo ;)
Publicar un comentario